Hace poquito tuve una comunión y no sabía qué podía regalarle, así que mi novio me dio una idea magnífica: DULCES.
Me dije: galletas, y él me dijo, y ¿por qué no bombones, que el chocolate le gusta a todo el mundo? Y... me convenció instantáneamente, así que, compré chocolate, gominolas, una cestita de mimbre y me puse a maquinar.
La forma de hacer los bombones es la misma que ya usé con mis primeros bombones (se puede ver aquí).
En esta ocasión, además de ponerle cereales de arroz inflado, a algunos les añadí crema de chocolate (blanca y negra, según el tipo de chocolate del bombón), a otros (los ramos de uva) no les puse nada, y a los grandotes les metí media nube de gominola.
Los del centro fueron un experimento, van rellenos de fresas trituradas. Están magníficos, aunque hice pocos y no los añadí. |
Pues una vez hechos los bombones, faltaba componer la cestita y lo hice así:
Primero puse una capa de papel de seda/pinocho, encima papel celofán y lo cubrí con nubes y gominolas de osito.
Después las cubrí con otra capita de celofán y puse los bombones.
Finalmente se cierra la cesta entre más celofán y se le ata un lazo, una tarjeta...